El ministro de Economía, Luis Caputo, volvió a convalidar una fuerte suba de la tasa de interés en la segunda licitación de deuda en pesos del mes, pero solo pudo renovar el 61% de los vencimientos. De esta manera, la administración libertaria tendrá que inyectar casi $6 billones al mercado, lo que podría incidir en el comportamiento del dólar y los rendimientos de los activos en moneda nacional.
En tal sentido, el secretario de Finanzas, Pablo Quirno, anunció que en la subasta de este miércoles se adjudicaron $9,147 billones tras haber recibido ofertas un total de $9,977 billones. Esto representa un nivel de refinanciamiento de 61,07% respecto a los $15 billones que vencían.
El Gobierno construyó un «muro» de US$ 20.000 millones para llegar a las elecciones sin sobresaltos con el dólar
Deuda en pesos: Caputo ofreció tasas anuales de hasta 69%
LECAP/BONCAP:
12/09/25 (S12S5): $2,086 billones a 4,48% TEM / 69,20% TIREA.
30/09/25 (S30S5): $1,192 billones a 4,20% TEM / 63,78% TIREA.
31/10/25 (S31O5): $0,700 billones a 3,90% TEM / 58,36% TIREA.
10/11/25 (S11N5): $1,865 billones a 3,94% TEM / 58,99% TIREA.
16/01/26 (S16E6): $0,774 billones a 3,60% TEM / 52,87% TIREA.
13/02/26 (S13F6): $0,519 billones a 3,68% TEM / 54,32% TIREA.
TAMAR:
10/11/25 (M10N5): $1,150 billones a +6,00% TNA.
16/01/26 (M16E6): $0,861 billones a +7,50% TNA.
13/02/26 (M13F6): desierta.
Dólar Linked:
15/12/25 (TZVD5): desierta.
BONCER:
30/10/25 (TZXO5): desierta.
Pese a que la inflación interanual se ubica en torno al 36%, Caputo se endeudó a 69,20% anual para poder absorber los pesos que estaban en manos de los bancos. Si se coloca la lupa sobre la dinámica mensual, el resultado no es mejor: 4,48% de tasa efectiva mensual contra 1,9% del Índice de Precios al Consumidor (IPC) en julio.
Antes del desarme de las Letras Fiscales de Liquidez (LEFI), el rendimiento giraba en torno a 29% anual. No obstante, el errático desmontaje de ese instrumento financiero, cuya finalidad era gestionar la liquidez bancaria, implicó una catarata de «pesos sueltos» que inundó el mercado y obligó al oficialismo a convalidar un salto significativo de tasas para evitar un salto cambiario. Lo mismo ocurrió en esta nueva subasta de deuda.
Alarma entre los analistas por la licitación de deuda
«Los bancos priorizaron la liquidez y el Tesoro deberá pagar el lunes los $5,7 billones que no pudo renovar. Veremos como impactan esos pesos en las tasas de mercado y en tipo de cambio», consideró el analista financiero Christian Buteler.
Por su parte, el director de la consultora Outlier, Gabriel Caamaño, determinó que «buena parte de lo que no se renovó fue porque directamente no le ofrecieron, de ahí se infiere que al menos una parte importante sea por cambios en integración encajes; tasas cortas al alza, a pesar de los montos máximos o topes».
Para el economista Juan Manuel Telechea, el dato de la licitación de deuda en pesos fue «muy malo» para el Gobierno: «Solo lograron renovar el 60% de la deuda, lo que implica una emisión de casi $6 billones (a pesar de haber tenido que pagar tasas muy altas)».
Un informe de Estudios Económicos del Banco Provincia calculó que hasta las elecciones nacionales de octubre vencen unos $24 billones, monto que equivale al 2,8% del Producto Bruto Interno (PBI) de la Argentina. Si el período analizado se extiende hasta diciembre, la cifra escala a $48,5 billones (5,6% del PBI).
La inflación se aceleró en la primera semana de agosto: cuánto impactó la suba del dólar
«Comparando vencimientos y colocaciones, la licitación de hoy tuvo el peor resultado del año: -$5,9 billones. Una parte responde a la suba de encajes, pero otra al aumento de la tensión«, consideró Matías Rajnerman, jefe de Macroeconomía de Estudios Económicos.
Un reporte de EcoGo remarcó que el aumento de encajes, el dinero que los bancos están obligados a mantener inmovilizado, le generó a las entidades financieras un rojo equivalente al 4,1% de los depósitos de pesos. Bajo esa premisa, los bancos tuvieron que salir a buscar $6 billones adicionales para cubrir las posiciones de efectivo mínimo en la cuenta corriente del Banco Central de la República Argentina (BCRA).
«La medida apunta a un objetivo electoral (contener el dólar) y no a cumplimentar los objetivos monetarios establecidos con el FMI. La barrida de los pesos ayudó a reducir la liquidez sobrante, subir las tasas de interés y volver a rearmar el carry trade con un dólar a la baja», sostiene el análisis.
Sin embargo, destaca, la contracara de la medida es un fuerte encarecimiento del crédito que derivará en un «esperable impacto negativo en la actividad (que ya venía estancada desde febrero) y un menor traspaso del salto en el dólar a la inflación».
MFN / Gi