Wanda, Mauro y la «China»: el patético show de la toxicidad

Noticias Relacionadas

Hasta hace poco menos de un año, Wanda Nara, Mauro Icardi y Eugenia “China” Suárez tenían, cada uno en lo suyo, exitosas y auspiciosas carreras. La ex conductora de “Bake Off” se enorgullecía de ser una de las tres estrellas de Telefe, el canal más visto del país, junto a Santiago del Moro y Susana Giménez; el 9 del Galatasaray era uno de los argentinos mejor pagos del fútbol europeo; y la actriz había estrenado en continuado las películas “Objetos”, “El duelo” y “Linda”, donde exponía en primera persona su altanera belleza.

Sin embargo, en los últimos meses todo comenzó a desmoronarse a causa de la escalada de violencia y actitudes descontroladas que los tres protagonistas de este culebrón mediático tomaron en lo sucesivo. La exposición de todas sus miserias, la ostentación de dinero en un país en constante crisis, la filtración de conversaciones y videos privados y la poca protección de la intimidad de sus hijos hicieron que el público se vuelva juez de este litigio y no tome partido por ninguno. Incluso el mismo medio les comenzó a dar la espalda, utilizándolos solo para hacer puntos de rating, sabiendo que el hándicap de cada uno comienza a acercarse a cero. Pero el morbo en los medios vende y, por estos días, este triángulo amoroso de rencor, amor y odio es pan caliente aunque deje un sabor amargo de boca.

En picada

Desde que se inició en el medio, Wanda Nara se llevó todo por delante. E hizo con todos lo que quiso. Incluso con su primer marido Maximiliano López, con quien negoció una separación más que exitosa para sus arcas. El ex delantero de River había quedado como el villano, ella como la engañada, incluso cuando se enamoró del mejor amigo del padre de sus hijos. Pero la personalidad de Mauro Icardi la superó y la está debilitando día a día. El poderío económico y la estrategia legal del padre de Isabella y Francesca parece ser infranqueable y ya dio sus frutos: el divorcio en Italia está saliendo a su favor y se acreditó el adulterio de la conductora por su amorío con Keita Baldé, futbolista con quien tuvo una relación extramatrimonial.

Esta situación abrió dos frentes. El primero, que la Justicia de Milán, ciudad donde se inició la demanda, evalúe repensar la división de bienes que le había dejado a Nara un departamento en Roma, una casa en el lago Di Como y otro departamento en Milán. Y segundo, que pueda perder la tenencia de sus dos hijas que nacieron en Italia. Esto, sin duda, la desanimaría por completo y le restaría energía para sus proyectos musicales junto a L-Gante, de quien se muestra cada vez más distante.

Y como si su futuro no fuera negro, se suma que Telefe ya confirmó que no la tendrá en sus planes para lo que resta del año en pantalla. El canal de la familia no se puede permitir tener a su conductora estrella metida en temas de infidelidades comprobadas y agresiones filiales, por lo que su lugar en la próxima edición de “Bake Off” o “Master Cheff” sería para Santiago del Moro. Le queda su otro gran trabajo de conducción, “Love Is Blind”, que ya grabó su segunda temporada, pero que el programa está en la mira ya que metieron preso a uno de los participantes por violencia de género.

Otro punto en contra es que Wanda Nara y Elián Valenzuela están separados. Y no es una cuestión de falta de amor o agendas desencontradas, sino que sus realidades se repelen. Mientras la conductora necesita de cerca el accionar policial y la lupa de la Justicia, el cantante de cumbia 420 necesita estar lo más lejos de los conflictos judiciales porque tiene una sentencia en su contra que ante el mínimo error no forzado lo metería nuevamente tras las rejas. Si hubiese estado en ese altercado en el ascensor del Chateau Libertador, cualquier intercambio físico con Mauro Icardi hubiese sido el principio de unos cuantos meses preso.

A su vez, Wanda necesita despegarse del entorno de su novio porque es el argumento que utiliza el padre de sus hijas para evidenciar que las niñas conviven con un ex presidario. Mientras se desconoce el final de esta historia, L-Gante ya se muestra con su nueva compañera artística, la cantante española Mar Lucas, con quien paseó por toda la ciudad y se dejaron sacar fotos cual adolescentes in love.

A Icardi la vida tampoco le sonríe. Aunque se muestre enamorado de la “China” Suárez y planeen su fastuosa boda que ya tendría vendida a una importante revista argentina, en lo profesional el presente es nulo y el futuro, incierto. Es cierto que el delantero fue autorizado por el cuerpo médico del Galatasaray para realizar su rehabilitación en Buenos Aires, pero los dirigentes no pueden creer que su jugador estrella se muestre en redes con su novia sentado en sus piernas.

Cabe recordar que en diciembre fue operado de rotura de ligamentos, una lesión que tarda entre ocho y diez meses en recuperarse. Su contrato vence en junio de este año pero, por lesión, el club está obligado a renovarlo automáticamente. En la cancha, Icardi le rindió al equipo con goles y títulos, pero su actitud de desinterés para con el fútbol y su exposición mediática, la misma que lo alejó de la Selección argentina de Messi y de instituciones como Inter de Milán y París Saint Germain, será la que lo deje sin equipo recién en junio de 2026.  

Premios Razzie

La tercera gran perdedora en esta historia es la “China” Suárez. El mundo de la actuación la mira de reojo, los espectadores le dan la espalda: su último film “Linda” fue un rotundo fracaso en cines y en la plataforma Disney + fue visto solo para ser defenestrado en redes, y por ello sus próximos proyectos son un gran signo de interrogación. En lo inmediato tiene el estreno de la serie “En el barro”, donde no es protagonista aunque sí lo es en la serie “La bastarda”, donde su director Jorge Nisco se debate entre incluirla en la promoción y que todo gire en torno a sus escándalos o apartarla de los medios y no tener la repercusión esperada, si es que se estrena.

Muy atrás en el tiempo quedó el cenicero de Susana y hoy la nueva generación apuesta más fuerte, con videos, chats, llantos de niños, pericias psiquiátricas y carreras que, en lugar de potenciarse, terminan dilapidándose.

Galería de imágenes

En esta Nota

Últimas Publicaciones